SCOTTSDALE, Ariz. – El torneo más concurrido del PGA Tour vio reducir su capacidad de fans en el evento. El Waste Management Phoenix Open que se jugará del 4 al 7 de febrero en el TPC Scottsdale, anunció que admitirá menos de 5,000 fanáticos de miércoles a domingo la semana del torneo debido al creciente número de COVID- 19 casos en Arizona. Los fanáticos también deberán usar máscaras y se someterán a controles de temperatura antes de que se les permita ingresar al terreno que abarca 192 acres, incluido el notorio hoyo 16.
El presidente del torneo, Scott Jenkins, dijo en un comunicado que mantiene «la esperanza» de que el torneo tendrá «un número extremadamente limitado de aficionados socialmente distanciados» en el evento de este año. Hasta este miércoles hubo 641,729 casos de COVID-19 y 10,673 muertes en general en Arizona, y las cifras se han disparado según el Departamento de Servicios de Salud de Arizona. El estado estableció un récord de 11,424 nuevos casos el 4 de enero.
Hasta el martes, solo 145 camas de UCI, o el 8% del total del estado, estaban disponibles en Arizona. En 2018, el Abierto de Phoenix rompió su récord de asistencia semanal más alta (719,179), así como la asistencia diaria más alta del miércoles (83,034), viernes (191,400) y sábado (216,818). Pero a partir de 2019, el torneo dejó de publicar cifras de asistencia.
La versión de este año del torneo, que tradicionalmente se juega el fin de semana del Super Bowl, ya ha confirmado la presencia de Brooks Koepka, Rickie Fowler, Matt Kuchar, Jon Rahm y Matthew Wolff, así como del campeón defensor Webb Simpson. Fuente: espn.com/golf