En su primera entrevista profunda desde que ocurrió su accidente automovilístico en febrero, un optimista Tiger Woods arrojó luz sobre sus lesiones traumáticas, su recuperación y lo que le depara el futuro.
“Creo que algo realista es jugar en el tour algún día, nunca a tiempo completo, nunca más, pero decides y eliges, tal como lo hizo el Sr. [Ben] Hogan, decides y elijes algunos torneos al año y juegas esos», dijo Woods durante una entrevista vía Zoom con Henni Koyack de Golf Digest desde su casa ubicada al sur de Florida. “Practicas alrededor de eso y te preparas para eso. Creo que así es como voy a tener que jugar a partir de ahora. Es una realidad lamentable, pero es mi realidad, y la entiendo y la acepto».
“No tengo que competir y jugar contra los mejores del mundo para tener una gran vida. Tras mi regreso tuve que escalar el Monte Everest una vez más. Tenía que hacerlo y lo hice. Esta vez, no creo que tenga el cuerpo para escalar el Everest, y eso está bien. Todavía puedo participar en el juego de golf. Aún puedo, si mi pierna está bien, aún puedo hacer click en un torneo aquí o allá. Pero en lo que respecta a escalar la montaña nuevamente y llegar hasta la cima, no creo que sea una expectativa realista de mí «.
Woods sufrió fracturas abiertas conminutas tanto en la tibia como en el peroné en su pierna derecha después de perder el control de su vehículo en las afueras de Los Ángeles el 23 de febrero. Fue trasladado de urgencia al Centro Médico Harbor-UCLA y posteriormente trasladado al Centro Médico Cedars-Sinai, donde pasó tres semanas y se enfrentó a la posibilidad de una amputación.
“Hubo un momento en el que, no diría que al 50/50, pero estaba muy cerca de decidir si iba a salir caminando del hospital con una sola pierna. Una vez que lo aquilaté, quise probar y ver si todavía tenía mis manos. Así que incluso en el hospital, hice que mi novia Erica Herman y mi amigo Rob McNamara me arrojaran cosas. Que me tiraran cualquier cosa.
Uno de los primeros recuerdos que tiene Woods después del accidente es pedir un palo de golf para jugar mientras estaba en su cama de hospital. Eso dio inicio a un proceso de rehabilitación que incluyó tres meses en una cama tipo hospital que tenía en su casa. Luego, una silla de ruedas. Luego pasó a usar muletas, lo que le permitió recuperar la independencia y moverse por su propia voluntad.
Los mensajes de apoyo y aliento siguen llegando hasta su teléfono y la bandeja de entrada de Woods desde el accidente, incluida una llamada del presidente, la cual Woods no puede recordar sin reírse al escuchar «la Casa Blanca en la línea 1». También expresó su profunda gratitud por la forma en que la comunidad del golf lo ha acogido. Varios jugadores del PGA Tour han visitado Woods en diferentes etapas de su recuperación, quizás ninguno con más frecuencia que Justin Thomas.
“Los Thomas y los Woods son como una familia”, dijo. «JT es como el hermano que nunca tuve, y Charlie es como el hermano pequeño que JT nunca tuvo».
Woods hará su primera aparición pública desde el accidente esta semana en el Hero World Challenge, un torneo de 20 jugadores que se juega en las Bahamas y que es a beneficio de su fundación. Que esté erguido y presente esta semana es muy alentador, pero Woods sabe que todavía queda un largo camino por recorrer.
Fuente y foto: golfdigest. com
